En un pico de tensión por el territorio disputado del Esequibo, el presidente de Venezuela reiteró su voluntad para dialogar cara a cara con su par de Guyana.
“Estoy listo para reunirme con usted muy pronto en el lugar de El Caribe que elijamos para dialogar en el marco del Acuerdo de Ginebra retomar las negociaciones de paz y cesen estas amenazas, y que cesen estas ilegalidades, a través del diálogo y a través de la diplomacia”, expresó el lunes el mandatario venezolano, Nicolás Maduro, dirigiéndose a su homólogo guyanés, Mohamad Irfaan Ali.
En función de encaminar otra vez la controversia histórica, Maduro aseguró que le dijo “todas las verdades” a Irfaan Ali respecto al Esequibo y le pidió que deje de manipular y de colocar a Venezuela como un “país agresor, imperialista y colonialista”.
“Había que decirlo, fui claro y directo, cara a cara, le dije al presidente de Guyana todas estas verdades en función de encaminar otra vez esta controversia histórica […] Tratan de ponernos como el país agresor, cuando somos el país agredido”, declaró el jefe de Estado venezolano durante su programa Con Maduro +.
Reiteró su denuncia de que la elite gobernante de Guyana, la compañía petrolera estadounidense Exxon Mobil y el Comando Sur de EE.UU. convirtieron esa nación en una base militar estadounidense, y ahora pretenden tomarse el mar no delimitado que le pertenece a Venezuela “a lo colonialista”, indicó.
“Después se victimizan y dicen Venezuela los amenaza, la República Bolivariana no amenaza a nadie”, subrayó Maduro y reafirmó que su país está defendiendo sus derechos históricos, jurídicos, basándonos en el derecho de paz, al Acuerdo de Ginebra, al diálogo y a la diplomacia.
Maduro se refiere a la declaración de Irfaan Ali en la Asamblea General de las Naciones Unidas (AGNU). “Las amenazas por Venezuela no cesan, anoche recibimos un mensaje amenazador de Venezuela en forma de comunicado por colocar bloques de petróleo que estaban en licitación”, señaló.
La tensión entre ambos países ha estallado por la decisión unilateral de Georgetown de licitar bloques petrolíferos en áreas sin delimitar en el territorio del Esequibo y luego de que la empresa estadounidense Exxon Mobil mostrara su interés en esta oferta.
